Harry Mulish puede ser
Como siempre, la lista de los probables premios Nobel siempre es un estímulo para conocer nuevos autores o para animarme a leer algunos que sólo los recuerdo en octubre. El año pasado, por ejemplo, me puse al día con Hugo Claus. Y este año me tocó el holandés Harry Mulisch, que siempre es un pendiente porque aparece desde hace años en las listas y siempre quiero leerlo. Y luego, pasado octubre, lo olvido. Pues este año me armé de valor, entusiasmado porque en The Literary Saloon lo consideran entre sus favoritos, y fui hasta la librería del CCPUCP -donde suelen tener los libros de Tusquets que no son novedades- y conseguí dos libros de Mulisch: Sigfrido y El procedimiento. Y han quedado en encontrarme su novela total: El descubrimiento del cielo. Empecé Sigfrido y, la verdad, qué quieren que les diga: ¡que le den el Nobel! Está buenísimo. Les dejo aquí una reseña de Javier Aparicio.
Esto dijo Mulisch sobre su novela en una entrevista en El País: "Leí de todo hasta los treinta años y luego paré. Ya me había formado una idea de lo que valía la pena saber. Qué podría sacar de una novela firmada por otro. Si es mala, me aburre. Cuando son buenas, hubiera querido escribirlas yo mismo. Además, no me sirven para nada. A no ser que pretenda ser acusado de plagio (risas). Es una broma. Lo que leo son ensayos, ciencia, análisis de todo tipo. Para Sigfrido devoré dos metros de libros sobre Hitler y su época. Leo de otro modo, por así decirlo."
También declaró: "Lo peor que podría pasarme es que una película fuera mejor que mi libro. Piense en Ana Karenina. Ha habido por lo menos una decena de adaptaciones a la pantalla y quién las recuerda. Sí, Greta Garbo, Vivien Leigh, pero por las actrices. Sin embargo, de Tolstói no se olvida nadie. En cambio, La naranja mecánica es el caso opuesto. El filme es magnífico y la obra de Antony Burgess ha pasado casi al olvido. Lo mejor sería que una parte del público sólo leyera la novela y el resto fuera sólo al cine. Un imposible, lo sé. Pero cuando una escena capta bien un momento del libro, devuelve sensaciones que un escritor no lograría sin una imagen. Eso es innegable.
Etiquetas: holanda, mulisch, NOTICIA, premios nobel, sigfrido, tusquets