El anticuario de Faverón
Con un título que me recuerda a Walter Scott, un libro cuyas alusiones debe estar en la mente de Gustavo Faverón gran lector de literatura inglesa, me acaba de llegar por atachment la primera novela de Faverón titulada justamente a El Anticuario. Ya la tengo en mi PC y este fin de semana empezaré a leerla. Sin embargo, como suempre, el pesado de Edmundo Paz Soldán ya se anticipó y me dice cómo le fue. Suena bien:
Gustavo tenía una sorpresa para mí. El manuscrito de El anticuario, su primera novela. Acabo de terminar de leerlo. Es una excelente novela, que echa por tierra ese lugar común de que en todo crítico anida un novelista fracasado. El anticuario comienza con ecos intencionales a Borges y Paul Auster, para luego desmarcarse y crear su propio mundo narrativo. Esta es la historia de Daniel, un hombre encerrado en un sanatorio mental, y de los intentos del narrador por comprender por qué Daniel, un día tres años atrás, en un acceso de locura, mató a su pareja, Juliana. La atmósfera es la de un cuento de terror, pero los sustos no tienen mucho que ver con fantasmas góticos sino con las intermitencias del corazón, con los extraños lazos fraternales y sentimentales que nos unen y también desunen. Tengo mucho más que decir sobre esta novela, pero es un poco raro reseñar un libro que por ahora sólo existe como manuscrito. En todo caso, me alegra saber que, una a una, todas las promesas de lo que podía llegar a ser Gustavo están siendo cumplida
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Buenas, Sr Thays.
¿Usted suele leer libros enteros en la pantalla? o ¿los imprime?
9:04 p. m.
Hola Ivan:
Esta historia de Faveron me recuerda el caso de un historiador de la PUCP - de una familia adinerada- que se dedicaba a vender libros y documentos antiguos a univ. extranjeras y que asesino a su enamorada/conviviente pero salio libre y luego se suicido en NYC. No me acuerdo de su nombre pero es una historia bien conocida entre los historiadores.
Un saludo,
Mildred
10:17 a. m.
Hola, Iván. Gracias por enlazar el comentario de Edmundo.
Mildred: sé de qué caso hablas, pero te aseguro que la novela es ciento por ciento ficción y no cuenta ningún hecho real.
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