Jorge Herralde homenajeado
Pero no solo poetas argentinos sino también editores españoles reciben homenajes en Buenos Aires. El editor Jorge Herralde dejó a Frédéric Beigbeder en el aeropuerto y de inmediato cogió sus maletas y el pasillo opuesto rumbo a la capital argentina para recibir el Gran Premio de la Provincia de Buenos Aires en su primera convocatoria. La nota de prensa de la editorial dice:
Jorge Herralde, fundador y director de la editor Anagrama con sede en Barcelona, invitado especialmente por el Gobierno de la Provincia de Buenos Aires, recibirá el miércoles 25 de junio el Gran Premio de la Provincia de Buenos Aires, en su primera convocatoria. Esta distinción ha sido instituida “para reconocer a personalidades internacionales por su aporte a la cultura mundial”. El premio le será entregado por el señor Gobernador Daniel Scioli a las 17hs en la Casa de la Provincia de Buenos Aires, Callao 237.
Asimismo, me envían una entrevista al editor premiado realizada por Alicia Villoldo-Botana y publicada en un medio argentino en la que declara con respecto a sus ultimos premios (el "Leyenda" en Madrid y este en Bs As):
Cuando se premia a un editor, lo que se premia es su catálogo, sus autores. El editor es artesano y portavoz de su catálogo, pero los protagonistas indudables son los autores. Confieso que cuando me dijeron el nombre del premio (Premio Leyenda) quedé un poco sobresaltado. Miré en el diccionario otras acepciones además de la más corriente y comprobé que viene del latín legere y está vinculado al verbo leer, con lo cual quedé más sosegado.
También se refiere al nivel cultural de Argentina con halagos:
El nivel cultural de Argentina es el más alto de América Latina, esto es indiscutible, a pesar del avituallamiento y con todas estas sucesivas caídas de la moneda. Recuerdo amigos argentinos pasar por Barcelona y comprar libros de Anagrama: ¡sólo un ejemplar para un colectivo de diez amigos! En Argentina durante unos años, gracias a la falsa paridad peso-dólar, los libros fueron muy asequibles hasta que entró el socavón de la realidad, el corralito de 2001, y se derrumbó la venta de libros de importación. Para luchar contra esto empezamos a publicar en Buenos Aires y ya llevamos alrededor de 40 títulos, que escogemos entre los destacados de la editorial con más posibilidad de venta en Argentina y todos los autores argentinos de nuestro catálogo. Como ha salido una nueva generación de escritores latinoamericanos, los he ido fichando con la idea de hacer, al menos, dos ediciones, una en su país de origen y otra en España, y desde aquí distribuirla al resto de América Latina, a diferencia de los grandes grupos que, en general, a menos que sean figuras muy conocidas, sólo hacen ediciones cantonales en sus respectivos países y no circulan, de lo que se quejan amargamente y con razón, pero los contables de esos grupos no se quieren arriesgar. A contracorriente, nosotros lo estamos haciendo y en Argentina hemos publicado a Alan Pauls, Martín Kohan, Martín Caparrós, y hemos rescatado la obra del gran Ricardo Piglia. Estamos atentos a los nietos del boom que escriben liberados de la famosa angustia de las influencias de la que hablaba Harold Bloom.