MOLESKINE ® LITERARIO

Notas al vuelo en cuaderno Moleskine® .

Denis Johnson por Fresán

carátula de la novela. Fuente: abcd las letras

Nunca olvidaré la tarde en que, en la librería La Casa Verde, luego de una entrevista a Mario Montalbetti para el extinto Vano Oficio, le pedí que me recomendara un autor de EEUU y me dio el nombre de Denis Johnson. Francisco Melgar atendía ahí en ese entonces y con él buscamos en internet más detalles. Fue como ver el hielo por primera vez, dentro de un baúl. La fama del extraordinario narrador norteamericano Denis Johnson en españa creció a partir de la colección de relatos Hijo de Jesús (Mondadori) y se asentó con Arbol de humo, también por Mondadori, ganador del National Book Award. Pero antes de eso, ya Anagrama le había echado el ojo y editado de él una novela llamada Ángeles derrotados que ahora ha recuperado en su edición de libros vueltos a la vida por sus 40 años (carátulas rojas, para más detalles). Yo la leí hace unas semanas y sí, la verdad es que el sujeto era un genio absoluto antes de Hijo de Jesús. El libro es reseñado por un, como siempre, entusiasta Rodrigo Fresán:

Cuando en 1983 el poeta de culto norteamericano Denis Johnson (nacido casi por casualidad en Múnich en 1949) publicó su primera novela, fueron muchas las firmas de renombre que celebraron su llegada al género. Da vértigo pensar lo que habrá sentido un debutante ante las loas de gente como John Le Carré, Richard Ford, Robert Stone y Philip Roth. Da aún más vértigo la lectura de Ángeles derrotados y volver a experimentar -en lo que constituye un rescate imprescindible de la editorial que la tradujo a nuestro idioma en 1986- la llegada de alguien que ya entonces era un maestro y que no ha hecho otra cosa que volar cada vez más alto hasta alcanzar la altura de clásicos modernos como Hijo de Jesús o Already Dead. Titulada sin calificativos como Angels en el original, Johnson -al igual que otros novelistas que vienen de la poesía; pensar en el Roberto Bolaño de Estrella distante y 2666 o en el Michael Ondaatje de En una piel de león, El paciente inglés o Divisadero- posee un extraño y admirable talento para narrar, con exquisito lirismo, el funcionamiento disfuncional de una mente delictiva. De ahí, la saga de los forajidos Bill y Jamie, triunfadores en el arte de perder y dispuestos a apostarlo todo concientes de que no tienen nada. Con una prosa entre cósmica e íntima que recuerda las texturas de ciertos filmes de Terrence Malick -esas panorámicas casi místicas, llamémosle cinemascope, de joyas como Malas tierras o Días del cielo-, Johnson nos cuenta, con delicadeza de bardo, la caída libre y sin retorno de estos jóvenes que nunca fueron expulsados del paraíso porque jamás estuvieron allí. De hecho, con los años, nos enteraríamos de los orígenes del marine encallado Bill Houston en la monumental y vietnamita Árbol de humo (2007), ganadora del National Book Award. Pero todo comenzó aquí y -hasta alcanzar esas estremecedoras páginas finales- aquí vuelve a comenzar. De regreso en el sitio que jamás debió dejar, Ángeles derrocados despliega otra vez sus alas. Historia maldita, sí, pero buena nueva. «Una pequeña obra maestra», bendijo Philip Roth en su momento. De acuerdo. Pero el tiempo pasa y -cuando se lo merecen- las obras maestras también crecen. No dejemos caer esta novela que ahora, más de un cuarto de siglo después, es una gran obra maestra.

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7:40 a. m.

Bueno, aquñi hay otro lector que desconocía a Denis Johnson. Será hora de ir de cacería a la libreria.

Saludos.    



6:49 a. m.

lo que dices sobre Denis Johnson es lo mismo que dio Coral en su reseña de Cosas Hombre, y no me digas que no lees Cosas Hombre porque tú colaboras ahí.

Gregorio    



8:31 a. m.

"Gregorio"

solo he leído COSAS hombre cuando publiqué un artículo ahí, pero eso fue hace tiempo. Si aparece algo sobre Denis Johnson (aunque sea escrito por alguien a quien no respeto para nada) ahí, me da curiosidad y le pediré a Fernando que me mande un número.

saludos, estimado "Gregorio"

IVAN    



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