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Notas al vuelo en cuaderno Moleskine® .

Presentando a Bolaño

Roberto Bolaño, en sus años mexicanos, con Bruno Montané. Fuente: infrarrealismo.com

Hoy ha rebotado en diversos periódicos del país la nota de EFE sobre la presentación del libro Bolaño salvaje (Candaya ediciones) que se llevó a cabo en Barcelona hace unos días. En ella se entrevista a Edmundo Paz Soldán, uno de los responsables de la edición, quien anota la importancia que tiene Bolaño en la literatura latinoamericana actual. Eso sí, es una pena que en ningún diario (salvo el diario Correo, según me comenta Carlos Sotomayor) hayan aumentado la información enviada por cable en el sentido de que el otro coordinador del texto es Gustavo Faverón, quien no pudo estar presente en la presentación. Tratándose de un crítico peruano, creo que la acotación era pertinente en los medios nacionales, ¿verdad? La nota dice:

Los veinticinco ensayos recopilados, la mitad de ellos nunca publicados, se ocupan de diferentes aspectos de la obra de Bolaño, "un autor –subrayó Paz Soldán– que era iconoclasta simplemente por el hecho de serlo, que creó un espacio para la recepción de su obra e incluso formuló un canon literario paralelo". Bolaño fue, de hecho, un eslabón entre los escritores del "boom" latinoamericano, especialmente Julio Cortázar y Mario Vargas Llosa, y una "literatura periférica" de la que formaban parte Rodolfo Wilcock, el poeta Leónidas Lamborghini, Horacio Castellanos Moya o Alan Pauls, antes de que publicaran en España. Jorge Volpi subrayó que las cuatro "obras maestras" de Bolaño, Los detectives salvajes, Estrella distante, Nocturno de Chile y 2666, en un breve lapso se han convertido en "novelas de culto, sobre todo para las generaciones menores de 40 años, algo parecido a lo que sucedió con la generación anterior a la nuestra en relación con Rayuela de Cortázar". Los mayores, según Volpi, sienten indiferencia hacia Bolaño, e incluso hostilidad. Paz Soldán destacó que "habría sido interesante ver hoy a un Bolaño ya consagrado enfrentado a su propia contradicción: crítico con un mundo literario, pero a la vez ganador de grandes premios y publicando en las editoriales más importantes". Al examinar su legado, Paz Soldán cree que tras su desaparición ha quedado "una reivindicación casi romántica de la figura del escritor marginado, a la vez que la exploración de una idea perversa en Latinoamérica, la fascinación que siempre han tenido los escritores por el poder".

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5:32 p. m.

La no mención de Gustavo Faverón ¿acaso no es indicio de la existencia de una argolla? A ver qué dicen los quejosos de siempre.    



11:44 a. m.

Una rectificación: lo edita Ediciones Candaya.

MoleskineAdicto    



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