El futuro del libro
El editor norteamericano John B. Thompson se encuentra en la Feria del Libro de Buenos Aires y desde ahí habló sobre el futuro del libro. La venta del libro digital, declaró, se encuentra en pañales. Así que tranquilidad para los libreros, que aún les queda un trecho que recorrer (pero yo no me quedaría tan tranquilo). Lo resume así Página12:
“No estamos seguros, nadie puede predecir el futuro”, se atajó el conferencista antes de dar los motivos por los cuales el libro de papel que todos conocemos está aún lejos de ser una tribu perdida pronta a desaparecer por el empuje civilizatorio. “Las ventas de libros digitales son todavía insignificantes”, señaló Thompson. Por debajo del 10 por ciento de los ingresos de los grandes grupos editoriales norteamericanos a ingleses. Diccionarios y enciclopedias sí parecerían condenados a ser reemplazados por sus homólogos digitales. “El acceso on line a la información los volvió obsoletos, meros objetos de coleccionista”, observó. “En el resto de las áreas no es tan claro el panorama”, evaluó. El concepto más interesante de su conferencia, sin embargo, fue el de la “revolución escondida”. “La gran ironía de esto es que cuando Bill Gates dijo que la revolución digital destruiría el libro, se gastaron millones de dólares, pero si realmente entienden su impacto en el mundo editorial, verán que produjo el resultado opuesto: hizo al libro inmortal.” “Ahora todo el proceso es digital, desde la primera línea del escritor hasta la impresión”, explicó Thompson. “Hasta podés imprimir a pedido, de a un libro a la vez.” La consecuencia, según el sociólogo británico, es que ningún libro queda ahora fuera de circulación o fuera de stock. Aún más, uno puede recurrir a cualquier libro fuera de circulación hace años y llevar al papel la copia que necesite. “Hoy los libros tienen una vida más larga”, concluyó. Según Thompson, Gutenberg sigue vivito y coleando.