Un hincha de Barcelona
[EL MERCURIO] Leo en la "Revista de libros" el discurso de Juan Villoro al recibir el premio de periodismo "Manuel Vásquez Montalbán" en España el 19 de febrero, en la categoría de Periodismo Deportivo. Sus palabras estuvieron enficadas a describir a la admiración que siente por la ciudad de Barcelona -donde vivió unos años- que empezó como un fanatismo futbolero. Sí, Juan es hincha del Barça: "El primer regalo que recibí en mi vida fue un llavero con el escudo azulgrana. Mi padre nació en Barcelona, vivió aquí hasta los diez años, y emigró a México en 1932. De niño, atesoró con fervor algunas cosas de su ciudad perdida: el parque de la Ciudadela, las aceras con lado de "mar" y lado de "montaña", el equipo que salta al campo con los colores del Hombre Araña. Me hice del Barça por extensión, como quien adquiere un mundo de fantasmas. En aquel tiempo anterior a la televisión satelital, muy de vez en cuando llegaban noticias de ese equipo. A principios de los años 60, vi al Barcelona de Cayetano Re en su gira por México, y en 1969, a los 12 años, fui con mi padre al Camp Nou a un derby contra el Real Madrid. No es fácil explicar lo que un equipo representa para la gente del exilio. Se trata más de una entidad soñada, hecha de idealizaciones, que de una escuadra que decide marcadores. Cuando la televisión comenzó a transmitir vía satélite, los culés de México nos sorprendimos de que nuestro club existiera".
Cuando supe de la desgracia que sucedió al Barcelona en el partido de ida de la Champions League, pensé de inmediato en Juan Villoro, quien debe estar rezando desde ahorita para que se cumpla el Milagro de Anfield y puedan eliminar al Liverpool en su propia casa. Peor imposible. A ver si Ronaldhino resulta el héroe que Juan pronosticó en un artículo estupendo en Etiqueta negra, y no el desastre del que fuimos testigos en el mundial de Alemania.
En la foto, Juan Villoro no solo es estupendo en literatura sino también hablando de fútbol