Juicio Marketero
[EL MUNDO] No hay que ser demasiado suspicaz para pensar que el juicio que los autores de El enigma sagrado (Michael Baignet, Richard Leigh y Henri Lincoln) le siguien a Dan Brown por haber sacado información de su libro para el exitoso Código Da Vinci es una campaña de marketing montada por la misma editorial demandada, Random House, que es una filial del consorcio alemán Bertelsmann que "casualmente" también publica a los demandantes. Desde que estos autores dijeron que Brown había copiado 15 tesis centrales de su libro (entre ellas la afirmación de que Jesús tuvo un hijo con María Magdalena y que sus descendientes viven todavía hoy) las ventas del libro El enigma sagrado y, cómo no, del Código Da Vinci (y también de la nueva novela de Brown) se han disparado por las nubes.
El día de ayer, Brown llegó al tribunal y declaró que los coautores son sólo "dos de los muchos que han escrito sobre las teorías de la línea de descendencia". Ellos insisten con diversos argumentos, el más ingenioso de los cuales es declarar que el nombre de unos de los protagonistas (Leigh Teabing ) es una alusión obvia a ellos: "Leigh" por Richard Leigh, mientras "Teabing" es un anagrama que respondería a Baigent.
En la foto, Dan Brown llegando ayer a los tribunales.